martes, 5 de enero de 2010

es necesario que me embuta rock acido en un bunker acorralado,
para disolver en unos pocos estaticos mi yo roido por los incesantes ruidos asquerosos de esta ciudad.
perdido en rapidos de gente que casi nunca quiere llegar,
pienso que todavia somos cazadores,
pero empuñando los cables de una mortandad industrial,
pienso en los crisantemos que antes vestian el reposo de los muertos
y que ahora son de exportacion.
si tengo fe como un puto granito de mostaza quiza las montañas que antes ocultaban todos los soles puedan caer, aplastar, destripar, colapsar la maquina,
o al menos unos cuantos buses de placas ecologicas.

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